EUFRASIA
Propiedades terapéuticas
La eufrasia contiene flavonoides (quercetósidos), glucósidos como el eufrósido, ácidos fenólicos, un aceite esencial, lignanos y taninos, principios activos que la convierten en una planta astringente, antiinflamatoria, antiséptica y cicatrizante.
Si se toma regularmente en infusión se previenen y se disuelven las cataratas y las carnosidades de los ojos.
Se usa para tratar las digestiones pesadas, estimular el apetito, combatir las infecciones de oído y bucales y aliviar la faringitis.
Aplicada externamente, detiene las hemorragias cutáneas.
Es la planta reparadora de los ojos por excelencia, incluso su nombre en inglés eyebright significa ojos brillantes. Reduce la inflamación ocular y ataca los focos infecciosos provocados por virus o bacterias.
Los herbolarios la aconsejan para tratar la blefaritis, la conjuntivitis, la inflamación de los párpados, los orzuelos y como remedio de apoyo en caso de alergias por polen, ácaros, polvo o humo, que cursen con inflamación ocular.
Es idónea además para las molestias derivadas del rechazo al uso de las lentes de contacto.
Fortalece los ojos, tanto por vía interna como externa.
Uso interno: Tradicionalmente, se ha ingerido esta planta para mejorar la vista, además de curar la superficie ocular, aliviando la inflamación y el lagrimeo excesivo.
Si se toma regularmente en infusión se previenen y se disuelven las cataratas y las carnosidades de los ojos.
La eufrasia no sólo tonifica y desinflama el ojo, sino que también lo hace con el resto de mucosas (oídos, senos nasales, garganta, intestinos), por lo que es una planta muy recomendada por los otorrinolaringólogos.
Es excelente para la rinitis, ya que ayuda a controlar los síntomas de las alergias primaverales como los estornudos, coriza, picor de ojos y el exceso de mucosidad líquida.
También combate la sinusitis, otitis, faringitis y bronquitis.
Por todo ello, es muy beneficiosa para la gripe y los resfriados con estados congestivos.
A nivel intestinal, alivia la estomatitis.
Además por su acción astringente, corta la diarrea y por sus propiedades eupépticas, combate la inapetencia y las dispepsias hiposecretoras.
Tradicionalmente se ha usado para los trastornos nerviosos, como cefaleas, insomnio e histeria.
Uso externo: Por su actividad astringente y sedante, se aplica su infusión en casos de conjuntivitis, blefaritis, orzuelos y otras afecciones del ojo (que cursen con inflamación, enrojecimiento, picor o lagrimeo).
También es útil en afecciones catarrales de otras mucosas, como la nasal (rinitis, sinusitis) y la del oído medio (otitis congestiva).
Es excelente para sanar las heridas, ya que detiene el sangrado, limpia la herida y ayuda a su cicatrización.
Usos
Agua de eufrasia: El remedio más simple para conjuntivitis, blefaritis, inflamación de los párpados, orzuelos, ojos llorosos por causa de la alergia, entre otros problemas, es la decocción de planta seca de eufrasia, a razón de una cucharada sopera por 200 ml de agua.
Cómo prepararla: Se hierve la mezcla un par de minutos y se deja en reposo. Después se filtra y se deja templar. A continuación se empapan compresas tibias en la decocción y se aplican sobre los ojos cerrados hasta que las compresas se enfríen por completo. Esta operación, que se repetirá tres veces al día, reduce la inflamación y proporciona sensación de alivio.
Infusión: La eufrasia también es útil en los brotes de ataques alérgicos, con rinitis y accesos de tos persistente.
Como prepararla: Para ello se puede preparar una infusión a base de eufrasia. Se toma una cucharada de la mezcla por cada taza de agua y se hierve durante unos 3 minutos. Después se filtra y se beben tres tazas calientes a lo largo del día, pudiendo aumentar la administración a cuatro tazas si la mucosidad es muy densa.
Contraindicaciones
Está contraindicado su uso interno durante el embarazo y la lactancia, así como en niños menores de 6 años y en caso de gastritis o úlcera gastroduodenal.