boldo

Propiedades terapéuticas

El boldo es una planta medicinal con múltiples beneficios que protege especialmente el hígado. El té de boldo se toma también para infecciones urinarias, para la vesícula e incluso para dormir.


En la medicina tradicional se usa como una solución infalible para eliminar los parásitos intestinales. Se usaba para tratar la gonorrea y otras enfermedades de transmisión sexual como la sífilis, y al sur del Perú se recomendaba como remedio depurativo para facilitar la expulsión de las piedras en la vesícula.


Las hojas del boldo contienen hasta un 2% de aceite esencial, con terpineol, además de cineol, linalol y alcanfor, hasta 17 alcaloides distintos, entre los que destacan por su importancia terapéutica la boldina y la isoboldina, así como flavonoides y taninos. 

Usos

Infusión:

Infusión de boldo con cardo mariano y diente de león para el hígado:

Tres plantas hepatoprotectoras. Basta una cucharada sopera bien rasa de la mezcla por vaso de agua.


Cómo prepararla: 

Se hierve 2 minutos la mezcla y se deja reposar 10 más. Es una infusión depurativa que debe tomarse por la mañana en ayunas.


Té de boldo con menta contra las digestiones pesadas.

El boldo se indica para todo tipo de trastorno digestivo leve, incluido el estreñimiento. Una fórmula, muy amarga, pensada especialmente para personas con tendencia a sufrir digestiones pesadas y lentas, es la que combina las hojas de boldo con raíz de genciana amarilla, fumaria y menta, a partes iguales.


Cómo prepararla: 

Basta una cucharadita por ración de agua. Se escalda, se deja 10 minutos en infusión y se le añade un poco de miel. Resulta ideal después de una comida copiosa.


Contraindicaciones

El boldo no se recomienda para personas con: